
En estos días pasamos por grandes cambios en nuestros hábitos cotidianos e incluso en la manera en que educamos los hábitos de nuestros niños. El hacerlos sentir parte de una rutina familiar es fundamental para su estabilidad emocional, sentido de pertenencia a un grupo y autovaloración. Por eso, si bien muchas veces es difícil compatibilizar el teletrabajo, las labores de la casa y el tiempo en familia, es fundamental mantener interacciones de respeto, empatía y colaboración, estableciendo esto como una meta de todos los integrantes del grupo familiar. No nos olvidemos que para los niños también son momentos de cambio y juntos podremos crecer y avanzar, sacando lo mejor de cada uno.
